Cuando te preguntes por qué no progresas en tu negocio, considera qué es lo que te está frenando y toma medidas al respecto.
He visto a muchos empresarios frustrados. Parece que sus negocios han llegado a un límite y creen que es imposible seguir adelante. Ese límite generalmente es de cristal. Si estás en esa situación, me gustaría ayudarte. Quiero que sepas cómo romper ese límite de cristal.
Puede que no sepas que es lo que te está frenando, en ese caso es mejor que hagas un autodiagnóstico. Analiza tu situación, objetivos, problemas e incluso miedos. También deberías revisar tu estrategia competitiva y las razones de consumo. Con toda la información, haz un análisis DAFO y un análisis CAME. Por último, crea un plan estratégico con todas las acciones a realizar.
A veces también puede deberse al propio empresario. Analízate a ti mismo, especialmente tu mentalidad, productividad personal y tus habilidades como empresario. Y muy importante, aunque algunos no crean que tenga un impacto, tu salud. Aquí entra en juego cómo te alimentas, si haces ejercicio, cómo controlas el estrés y el descanso óptimo.
¿Te ha resultado útil esta reflexión? ¿Lo harías de otra manera? Estoy aquí para escucharte.
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José Ángel Jiménez
Director y Fundador de A Fuego Fuerte